domingo, 19 de mayo de 2013

Azúcar en la sangre


Has intentado alguna vez hacer volar un avión o helicóptero manejado mediante control remoto? Si giras el mando bruscamente hacia un lado, el aparato se estrellará contra el suelo. Y si lo giras bruscamente en la dirección opuesta, el aparato se encarará cielo arriba, resultando difícil controlarlo.
Para la gente con diabetes, controlar la concentración de azúcar en sangre (o la concentración de glucosa en sangre) viene a ser como pilotar un avión con control remoto. Para permanecer en el aire y pasártelo bien, tendrás que mantener estable la concentración de azúcar en sangre. El hecho de tener una concentración de azúcar en sangre demasiado alta puede hacer que te encuentres fatal, y tener muchas veces una concentración de azúcar en sangre demasiado alta no es nada saludable.

¿En qué consiste tener un exceso de azúcar en sangre?

La concentración de glucosa en sangre es la cantidad de glucosa que contiene la sangre. La glucosa es un azúcar procedente de los alimentos que ingerimos, y también se forma y almacena dentro del cuerpo. Es la principal fuente de energía de las células del cuerpo, y se transporta a todas las células a través del torrente sanguíneo.
La hiperglucemia es el término médico que se emplea para referirse a las concentraciones de azúcar en sangre demasiado altas. La hiperglucemia ocurre cuando el cuerpo o no pude fabricar insulina (diabetes tipo 1) o bien no reacciona adecuadamente a la insulina (diabetes tipo 2). El cuerpo necesita insulina para que la glucosa contenida en la sangre pueda entrar en las células del cuerpo, donde se utiliza como fuente de energía. En las personas que han desarrollado diabetes, la glucosa se acumula en la sangre, provocando hiperglucemia.
Tener demasiado azúcar en sangre durante largos periodos de tiempo puede provocar graves problemas de salud si no se trata. La hiperglucemia puede lesionar los vasos sanguíneos que llevan sangre a órganos vitales, lo que puede incrementar el riesgo de cardiopatías, apoplejía, enfermedades renales, problemas visuales y problemas neurológicos en las personas con diabetes. Estos problemas no se suelen dar en los niños o adolescentes, cuya diabetes tiene pocos años de evolución. No obstante, estos problemas de salud pueden aparecer durante la etapa adulta en algunas personas con diabetes, sobre todo si estas no se han tratado o controlado la diabetes adecuadamente.
La concentración de azúcar en sangre se considera alta cuando está por encima del intervalo de referencia considerado normal. Tu equipo de diabetología te indicará cuál es ese intervalo de referencia o rango ideal en tu caso concreto.

Causas de la hiperglucemia en las personas con diabetes

Controlar la diabetes viene a ser como un triple malabarismo porque se deben tener en cuenta y sopesar equilibradamente los siguientes tres factores:
  1. los medicamentos que se toman (insulina y/o comprimidos)
  2. los alimentos que se ingieren
  3. la cantidad de ejercicio que se hace
Estos tres factores deben estar equilibrados entre sí. Si cualquiera de ellos se descompensa, ocurrirá lo mismo con la concentración de azúcar en sangre. Por lo general, el exceso de azúcar en sangre puede estar provocado por:
  1. no tomarse los medicamentos para la diabetes cuando se deberían tomar o no tomar la cantidad adecuada.
  2. no seguir correctamente el plan dietético para la diabetes (como comer en exceso en una ocasión especial sin ajustar las dosis de los medicamentos para la diabetes)
  3. no hacer suficiente ejercicio
  4. tener una enfermedad, como una gripe, o estar estresado
  5. tomar otros tipos de medicamentos que repercuten sobre los efectos de los medicamentos para la diabetes.
El hecho de tener una concentración alta de azúcar en sangre de forma aislada generalmente no es motivo de alarma -es algo que le ocurre de vez en cuando a todo el mundo que tiene diabetes. No obstante, si tienes hipoglucemias repetidas, coméntaselo a tus padres y a tu equipo de diabetología. Es posible que sea necesario ajustarte la dosis de insulina o el plan dietético, o tal vez tengas algún problema en el equipo de administración de los medicamentos, como una bomba de insulina que no funciona correctamente. En cualquier caso, asegúrate de pedir ayuda para normalizar tu concentración de azúcar en sangre.

Signos y síntomas de la hiperglucemia

Los signos de la hiperglucemia incluyen:
  1. orinar mucho: los riñones responden a una concentración alta de glucosa en sangre excretando la glucosa sobrante a través de la orina. Las personas con diabetes necesitan orinar más a menudo y en mayores cantidades.
  2. beber mucho: debido a que la persona está perdiendo mucho líquido a través de la orina, tienen mucha sed.
  3. perder peso a pesar de no haber perdido el apetito: si no hay suficiente insulina para ayudar al organismo a utilizar la glucosa, este tendrá que descomponer el músculo y la grasa almacenada en un intento de proporcionar combustible a las células hambrientas.
  4. estar cansado: puesto que el cuerpo no puede utilizar adecuadamente la glucosa como combustible, uno puede sentirse inusualmente cansado.

Tratar la hiperglucemia

Para tratar la hiperglucemia, primero es preciso dilucidar qué es lo que la ha provocado. Tu equipo de diabetología te dará indicaciones específicas sobre cómo mantener la concentración de azúcar en sangre dentro de los límites saludables, pero hay algunas recomendaciones generales para tratar la hiperglucemia en función de su causa que se reproducen en la siguiente tabla:
Motivo de la hiperglucemia:Hacer:
No tomar suficiente insulina u otro medicamento para la diabetes
  1. Asegurarse de que se toma el tipo adecuado de insulina, la dosis correcta y en el momento adecuado.
  2. Comprobar que la insulina no ha caducado.
  3. Asegurarse de que todas las piezas del equipo de administración de los medicamentos para la diabetes (bombas, medidores, etc.) funcionan correctamente.
  4. Es posible que sea necesario cambiar de medicamentos o ajustar las dosis -consultar con el equipo de diabetología.
No seguir correctamente el plan dietético (como comer en exceso en una ocasión especial sin ajustar las dosis de los medicamentos para la diabetes)
  1. Acudir a un nutricionista o dietista titulado para que introduzca cambios en el plan de comidas cuando sea necesario.
  2. Ajustar la dosis de insulina/ comprimidos para la diabetes cuando se come más o menos de lo recomendado en el plan dietético (el equipo de diabetología te enseñará a hacer esos ajustes).
No hacer suficiente ejercicio
  1. Diseñar un plan que permita reservarse tiempo para hacer ejercicio.
  2. Ajustar la medicación siguiendo las instrucciones del equipo de diabetología.
Enfermedad o estrés
  1. Ponerse en contacto con el equipo de diabetología.
  2. Seguir inyectándose insulina (es posible que sea necesario ajustar la dosis).
  3. Comprobar frecuentemente la concentración de azúcar en sangre.
Utilizar otros medicamentos que pueden elevar la concentración de azúcar en sangre
  1. Ponerse en contacto con el equipo de diabetología cuando se empiece a tomar cualquier otro medicamento.
  2. Es posible que sea necesario ajustar las dosis de insulina o de los comprimidos para la diabetes mientras se toman otros medicamentos que elevan la concentración de azúcar en sangre.
El hecho de tener una concentración alta de azúcar en sangre de forma aislada generalmente no es motivo de alarma -es algo que le ocurre de vez en cuando a todo el mundo que tiene diabetes. No obstante, si tienes hiperglucemia consistentemente, deberías comentárselo al médico.

¿Qué es la cetoacidosis diabética?

Cuando el cuerpo no tiene suficiente insulina, la glucosa permanece en la sangre y no puede entrar en las células para que estas la utilicen como fuente de energía. Esto puede ocurrir, por ejemplo, cuando una persona se salta una dosis de insulina, o cuando sus necesidades de insulina aumentan súbitamente (como cuando enferma de gripe) y no se reajustan las dosis consistentemente. Cuando el organismo no puede utilizar la glucosa como fuente de energía, empieza a utilizar la grasa corporal. Cuando ocurre esto, se liberan en el torrente sanguíneo unas sustancias químicas denominadas cuerpos cetónicos. Algunos de estos cuerpos cetónicos, al igual que la glucosa sobrante, se eliminan a través de la orina.
Una concentración elevada de cuerpos cetónicos en sangre puede resultar problemática porque hace que la sangre se vuelva ácida. El exceso de ácido en la sangre altera el equilibrio químico del organismo y provoca los síntomas que se relacionan a continuación. En las personas con diabetes, este problema es denomina cetoacidosis diabética, abreviada como CAD. La CAD es un trastorno muy grave que, si no se trata, puede conducir al coma o incluso la muerte. No obstante, la buena noticia es que se puede prevenir y tratar, de modo que muy pocos adolescentes mueren por su causa.
La CAD se da más a menudo en personas que tienen diabetes tipo 1, pero a veces se puede dar en personas que tienen diabetes tipo 2.

Signos y síntomas de la cetoacidosis diabética

Los síntomas de la CAD generalmente no se presentan todos a la vez -por lo general, van apareciendo lentamente en el transcurso de varias horas. Las personas con CAD pueden:
  1. encontrarse agotadas
  2. tener mucha sed u orinar mucho más que de costumbre
  3. tener la boca seca o presentar signos de deshidratación.
Los síntomas que acabamos de mencionar están provocados por la hiperglucemia que suele ocurrir antes de que una persona desarrolle CAD. Si la persona no recibe tratamiento, pueden aparecer los siguientes síntomas de CAD:
  1. dolor abdominal
  2. náuseas y/o vómitos
  3. aliento de olor afrutado
  4. respiración rápida y profunda
  5. confusión
  6. pérdida de la conciencia ("coma diabético").

Comprobar si se tiene cetoacidosis diabética

¿Cómo puedes saber si tienes CAD? Puesto que los síntomas de la CAD se parecen a los de la gripe, es importante que compruebes las concentraciones de azúcar en sangre y de cuerpos cetónicos en orina cuando te encuentres mal o creas que tienes síntomas de CAD.
Puesto que los cuerpos cetónicos se excretan a través de la orina, la concentración de cuerpos cetónicos se puede comprobar en casa analizando una muestra de orina. Si la prueba de orina da negativo, suele significar que los síntomas no se deben a la CAD. Sigue tu plan de control de la diabetes para saber cuándo debes comprobar tu concentración de cuerpos cetónicos en orina y qué debes hacer si obtienes un resultado positivo.

Tratar la cetoacidosis diabética

La CAD es muy grave, pero se puede tratar si la persona afectada va al médico o al hospital inmediatamente. Para encontrarse mejor, una persona con CAD necesita recibir insulina y líquidos por vía intravenosa (VI), es decir, a través de un tubito que se introduce en una vena del cuerpo. Informa a tus padres o a alguien de tu equipo de diabetología si presentas cualquiera de los síntomas de cetoacidosis o si te encuentras mal y no sabes qué hacer para controlar la diabetes.
Asimismo, siempre deberías llevar una pulserita o collar de identificación médica donde ponga que eres diabético. Así, si no te encuentras bien, quienquiera que te ayude -incluso si se trata de una persona que no te conoce- sabrá que tiene que pedir ayuda médica. Esta identificación médica también puede contener el teléfono de tu médico o el de tus padres.

Evitar la hiperglucemia y prevenir la cetoacidosis diabética

Por mucho que se cuiden, las personas con diabetes a veces tendrán alta la concentración de glucosa en sangre. Pero la mejor forma evitar problemas es mantener la concentración de azúcar en sangre lo más cerca posible del intervalo deseable, lo que implica seguir al pie de la letra el plan de control de la diabetes. Comprobando tu concentración de azúcar en sangre varias veces al día podrás saber cuándo es demasiado alta. Entonces podrás tratártela y evitar la CAD.
La hiperglucemia no siempre provoca síntomas, y una persona diabética que no comprueba regularmente su concentración de glucosa en sangre puede estar teniendo concentraciones lo bastante altas como para dañar a su cuerpo incluso sin presentar síntomas. Los médicos pueden utilizar la prueba de la hemoglobina glicosilada (abreviada como HbA1c) para averiguar si una persona ha estado teniendo concentraciones elevadas de azúcar durante cierto tiempo aunque esa persona no presente síntomas obvios de hiperglucemia.
Aquí tienes algunos consejos adicionales para ayudarte a evitar las concentraciones altas de azúcar en sangre y a prevenir la cetoacidosis:
  1. Haz las comidas principales y los tentempiés a las horas adecuadas e intenta no saltarte ninguno.
  2. Toma la cantidad de insulina adecuada.
  3. Comprueba regularmente tu concentración de azúcar en sangre, y tu concentración de cuerpos cetónicos en orina cuando lo recomiende tu plan de control de la diabetes.
  4. Sigue al pie de la letra tu plan de control de la diabetes.
Revisado por: Steven Dowshen, MD

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